The Apple Boy: La metamorfosis de Tito

The-Apple-Boy

Tito. La verdad, a mi me suena a carnicero, a tipo de barrio, arrabalero y de vieja escuela. Tito me hace pensar en un neófito joven de la tercera edad, laburante y familiero. Pero este caso que quiero contarles, rompió con mis fútiles paradigmas de asociación libre para con este mote tan trillado.

El Tito en cuestión, es Hipólito Giménez Blanco, un argentino de 22 años que se está haciendo conocer en el mercado neozelandés bajo otro nickname. Hipólito ahora es, y cada vez para una audiencia más amplia, “The Apple Boy”.  Es desarrollador web y entre 2006 y 2009 se desempeñó laboralmente en Wunderman y BasoBrovelli. Pero se cansó, quiso más, eligió dejar atrás el dogma del Tito argento y viajó a Nueva Zelanda con altas expectativas de crecimiento personal y laboral.

Dos semanas después de aterrizar en Auckland, empezó a trabajar recolectando manzanas en una granja. Ciertamente, no era lo que esperaba, pero no pensaba por eso quedarse cruzado de brazos. Por el contrario, usó sus ratos libres para investigar todo sobre las manzanas, lo que le dio un brief casi perfecto para empezar su verdadera búsqueda laboral. Tito comenzó a acercarse a las agencias, preguntando por los jefes y obsequiándole manzanas a todo el personal, con una etiqueta que reza: “Meet me at theappleboy.com”. Esto no sólo inspiró a Katherine, empleada de una de las agencias que visitó, a escribir este artículo, sino también a muchas webs especializadas en el tema a publicar la campaña de DMKT de self-promotion que emprendió.

Vean el video que colgó en su página y no se pierdan la increíble metamorfosis de Tito a The Apple Boy.

The Apple Boy Story from Flux Creativo on Vimeo.

5 opiniones en “The Apple Boy: La metamorfosis de Tito”

  1. Increíble, un caso similar pero offline fue el de una chica que, deseperada por entrar a trabajar en una conocida agencia de publicidad, pintó un mural enfrente de las oficinas de la agencia ofreciendo sus servicios (no tengo el link). Eso es ser proactivo!
    Saludos!

  2. Hola Mauro,
    Excelente reflexión sobre los llamados “Tito”. La verdad es que lo odié en algún momento. Ni bien llegué a este país de descendencia anglo, dije “Hipólito”. Era una especie de trabalenguas para los kiwis. Tito me simplifica las cosas!

    Gracias por la onda del post!
    abrazo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *