Macri juega sucio

Para tapar las deficiencias de su gestión de residuos sólidos urbanos y el pésimo contrato con las empresas recolectoras que intentó aprobar para la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, lanzó una campaña de “concientización” donde propone a los vecinos porteños “Jugar limpio”.

Justamente eso es lo que jefe de Gobierno porteño no hace.

En respuesta, Greenpeace lanzó esta contra campaña:


Ayudá a Greenpeace a difundirla posteando en tu blog, enviandoselo a tus amigos por email, o compartiendolo en las redes sociales de las que formes parte (Facebook, Sonico, MySpace).

También entrá acá y escribile a Macri y exigile que juegue limpio. Pedile que cumpla la Ley de Basura Cero ya mismo y que termine con la contaminación.

Es hora que nos traten como gente inteligente y dejen de intentar vendernos espejitos de colores.

¿Qué opinás?

6 opiniones en “Macri juega sucio”

  1. Sinceramente no estoy de acuerdo con el post.

    La campaña de Macri está dirigida a las personas que básicamente son sucias y no tiran la basura en donde corresponde.

    Por otro lado, está el tema de la basura y coincido con que se debería respetar la Ley de Basura Cero.

    O sea, son 2 temas: 1, la gente que es ensucia las calles y 2, la basura. La campaña apunta a la primera. Quizás vos pensás que se está tapando el problema verdadero de la basura con una campaña de concientización pero creo que son temas diferentes y que la gente se da cuenta de ésto.

    No creo que los argentinos tengamos una cultura de reciclar. No he visto campañas concretas educando a las población hacia realizar esta práctica por lo que creo que colocar contenedores diferenciados y recolección diferenciada en toda la Ciudad no tiene sentido sin una verdadera educación detrás. Es decir, colocás los contenedores, la gente recliclaría?

    Por último, deberían exigirles al resto de los gobernantes, entre ellos Scioli (que “compra” la basura de Macri) lo mismo que se le exige a todos. Sino, parecería una movida un poco política.

    Un abrazo!

  2. Hernán, ¡que corra la bola!
    Nico, esta campaña podría haber concientizado sobre la separación en origen, haciendo práctico el uso de los contenedores diferenciados; pero no lo hizo. Se prefiere el proselitismo absurdo de generar bases de datos con campañas insustanciales como Jugá Limpio, antes que perderse el negocio de la basura. Hay cosas importantes, como la ciudad llena de papelitos en la calle, y hay otras de vida o muerte, como la contaminación que generan los rellenos del conurbano.

  3. Justamente lo que digo es que además de esta campaña se debería haber realizado otra en relación al destino de la basura. Pero insisto, si Macri está haciendo mal las cosas, que sucede con el resto de los gobernadores? Por lo menos Macri concientiza a la gente sobre no tirar basura al piso que algo puede llegar a colaborar con el problema de la suciedad de las calles. ¿Que campañas hacen el resto de los gobernadores? Espero que Greenpeace también presione a Scioli, Schiaretti, etc. para lograr el mismo objetivo.

    Saludos!

  4. Estoy de acuerdo con que una cosa (ser limpios como ciudadanos) no quita la otra (la responsabilidad de los gobernadores en cuanto a donde va la basura que nosotros tiramos en los tachos).

    Sin embargo sí estoy de acuerdo a que una campaña de este tipo debe ser coherente y tener una visión global de todo el proceso de la basura. No se resuelve sólo con tirar un papel en el cesto (aunque es un buen compienzo). Eso es una cuestión de educación (en primera instancia al menos).

    Debe exisitir una acción conjunta!

  5. Nico,

    La diferencia entre Scioli y Macri es que Macri tiene una ley que cumplir, la 1820 (basura0) y no lo está haciendo. Y encima, gasta una fortuna en una campaña que distrae del foco de la cuestión.

    POdría haber invertido ese dinero en explicar algo tan simple como separar la basura en origen.
    Con mis compañeros de trabajo hicimos estos carteles para descargar: http://www.elviajedeodiseo.com/blog/2008/05/08/separando-la-basura/

    Es MUY FACIL Y PRACTICO separar la basura. La responsabilidad final no está en Macri, sino en cada uno de nosotros.

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